Christian Luciani junto a su esposa Roxana Equini iniciaron este emprendimiento, de buena madera somos, en donde diseñan y crean juguetes de forma artesanal en madera, partiendo desde la selección de la madera para cada juguete.
Aprovechan al máximo cada recorte para cuidar el medio ambiente, como así también los colores y detalles de los mismos, que se realizan con materiales de primera calidad y no tóxicos.
Esta idea surge viendo que en el mercado casi no se encuentran estos productos y también observando la necesidad que tiene los profesionales de la educación y la salud (como docentes, psicopedagogos, etc.) de encontrar quien pueda proveerles juegos didácticos innovadores, Entonces se dieron cuenta que su entendimiento es sustentable por varias razones:
Por un lado cuidan del medio ambiente porque son cero pilas ya que logran juegos y juguetes con movimiento, sin la necesidad del uso de pilas o baterías. Por otro tiene un impacto positivo en la educación de los niños y por otro tienen productos de calidad a un precio accesible.
Primero vendieron sólo en ferias directo al público y hace un tiempo comenzó a abrirse otra puerta a través de la página web y por recomendaciones de los mismos compradores.
El año pasado su trabajo fue reconocido con el premio al mejor emprendedor, en la categoría "Producción" que otorga "CITI-AVINA-LA NACION".