-¿Qué implica dar la teta para una mamá?
La Puericultora trabaja en todo a lo que a lactancia y crianza se refiere. Por lo que debe tener en cuenta las necesidades del recién nacido y el medio que lo rodea aún desde antes del nacimiento. Contiene, escucha, observa y brinda ayuda externa sin interferir en el vínculo madre – hijo.
La lactancia natural es la continuación del embarazo y del parto, y la alternativa más saludable para las mamás y los bebés.
El niño pertenece al cuerpo de su madre. Necesita de él. Hacer de él un lugar parecido a la panza otros 9 meses más fuera de el.
Las madres y los padres que tienen a su bebé en brazos por primera vez se sienten más maravillados y más solos que nunca. Para darle el cuerpo y la nutrición a nuestros hijos necesitamos ayuda, guía, mirada, confianza y sostén.
Como madre me he sentido agotada, sin forma, sin tiempo, sin espacio, sin identidad, ultrademandada, absorbida, devorada. He sentido miedo y la soledad más infinita, y también he aprendido a valorar a mi compañero (el padre) cuando pudo sostener su rol con amor y altruismo. Verse amamantando por primera vez puede resultar muy extraño. Las mujeres solemos estar muy desconectadas con nuestros cuerpos, y sentir su poder quizás sea incómodo o aterrador. Pero hay una memoria celular maravillosa en la naturaleza y el bebé nace sabiendo que tiene que reptar hacia el pecho de su madre, y ahí se sentirá seguro y protegido. Cuando podemos dimensionar que la lactancia es la continuidad del embarazo y el parto, podremos entregarnos con confianza a esta nueva etapa de la vida hecha leche.
Si un bebé pudo nacer del vientre de su madre sin sustitutos ni úteros tecnológicos o industrializados, por qué creer que nuestra leche no será suficiente o necesitará complementos. La sociedad de consumo nos ha llenado de miedos y culpas con respecto al bien o mal criar a los niños. Es interminable la cantidad de productos y servicios pensados para separar a los padres de sus hijos. Nos hacen creer que es para educarlos autónomos, cuando la mayoría de los adultos somos adictos a algo por no haber podido bancarnos el vacío que significa ser solos, sin estar dentro de mamá. Por lo tanto, no solo se priva al bebé de la experiencia reparadora de pertenecer al cuerpo de sus padres, sino que se priva a los padres del placer biológico de permanecer cerca de nueve meses más acunando a sus hijos.
También es cierto que muchas mujeres no desean amamantar y merecen ser respetadas y acompañadas. Todas las madres debemos escuchar nuestra voz interior y tenemos derecho a que se respeten nuestros tiempos. Los problemas nacen cuando no sabemos qué deseamos ni qué nos pasa, y mucho menos qué es lo que realmente necesitamos. O mejor dicho, cuando no sabemos que respondemos a los deseos de otros. En mayor o menor medida todos, con una mano en el corazón, preguntándonos qué es lo que nos pediría nuestro hijo si pudiese hablar sobre sus necesidades, sabemos cuál es la respuesta.
-Dar la teta, a demanda o con frecuencia estipulada?
-Dar la teta eleva los niveles de prolactina y oxitocina en la madre, lo que le genera relajación y apego físico a su bebé. Está pensado todo como una relojería. Hay que priorizar a quien no puede salvarse solo. Si todo está tan bien diagramado, ¿por qué las lactancias fracasan? Hoy en día tenemos que aprender a dar la teta. Aunque el conocimiento filogenético esté, estamos rodeadas de publicidad y discursos controversiales, hemos dejado de lado la sabiduría ancestral y aquella información que se transmitía de generación en generación. Por eso es importante que los padres puedan sentirse acompañados por un profesional en lactancia que les enseñe cómo es una prendida correcta y efectiva, qué quiere decir lactar a demanda y cuándo el niño hace una succión efectiva. Ese saber lo tienen muchos médicos pediatras (no todos), muchas enfermeras y las puericultoras.
La producción de leche se mantiene en relación con el estímulo, si el estímulo del bebé está hecho en forma correcta, con la frecuencia adecuada, la producción se adapta perfectamente a sus necesidades. Para esto el bebé puede estar en una posición especial que le permita abrir su boca, tomar gran cantidad de pecho y hacer una succión ondulada, rítmica y vigorosa, profunda. Además, el niño es el que decide cuándo quiere, cuánto quiere y de qué pecho quiere. Aunque la demanda bien entendida incluye ocho tomas como mínimo al día.
-¿Cómo puede ayudar el padre? y la familia?
-En un triángulo siempre hay un vértice que se queda mirando cómo se conectan los otros dos, pero la circulación energética es perfecta. Antes eran una línea, ahora una figura, con metros cuadrados propios, para sembrar y cosechar experiencias, vidas y evolución personal. Ser un triángulo es aprender a vivir con otros, a dar y recibir desde la izquierda y desde la derecha, después podemos ser un cuadrado. Ser un triángulo es pasar de la tierra al cielo y del cielo a la tierra. Es, tal vez, la experiencia más transformadora y desafiante de nuestros días.
-¿Cómo es el método del que hablás en tu libro?
-Desarrollé un método llamado Biodecodificación Rizoma que sintetiza todo mi recorrido profesional y que busca desentrañar el pasado desde el presente hasta nuestros bisabuelos. Para luego ser verdaderamente libres de elegir, conociendo si estamos siendo leales a nuestros ancestros de una forma inconsciente.
Se Trata de una terapia de Desprogramación de los síntomas comprendiendo su origen, sentido y ciclos en la que utilizamos herramientas como las meditaciones chamánicas y las constelaciones rizomáticas para desenredar la historia de cada familia.
-¿Qué se puede decodificar?
Un dolor, un diagnóstico médico o un síntoma. Un temor, un vínculo roto, un vínculo tóxico, un conflicto emocional, un accidente, un tormento, un obstáculo, un misterio.
Buscando los conflictos disparadores de la problemática y luego los programantes: aquellos hechos que en la vida del consultante y durante su gestación fueron haciendo huella en la misma temática (por ejemplo abandono, soledad, abuso) para que en algún momento “explote” afectando el cuerpo o el mundo emocional.
Si hay un tejido u órgano afectado nos estará hablando de un tipo de conflicto y de un ciclo en particular. El sentido del órgano o sistema, y lo que nos hace hacer o nos impide hacer tal o cual enfermedad es la clave para decodificar.
Violeta Vazquez es Puericultora, doula, astróloga, y productora de Tv. Actualmente es Directora de la Escuela de Formación Profesional en Puericultura y Familia de PanzayCrianza. Directora del Equipo de Puericultura Hospital Español, Rosario. Autora de La historia de Dar la Teta. Ed: del Nuevo Extremo 2014. Docente del programa de actualización en Lactancia Materna para Residentes Obstétricas. Gob. Ciudad de BSAS. 2014. Como terapeuta, dirige el equipo de atención terapéutica en Biodecodificación Rizoma.