Con las orejas queremos escuchar Con los ojos mirar y mirar Con las manos queremos trepar Y con los pies: saltar y saltar
Mariana Sánchez desde pequeña aprendió a bailar. Comienza estudiando expresión corporal a los doce años, para seguir con la danza clásica, contemporánea, improvisación y la acrobacia. Andando en zancos a los 20 años llega al circo y decide quedarse en ese mundo, en el que aprende: trapecio, cuerda, tela, elásticos, aro, trapecio a vuelo, malabares, equilibrio y monociclo. Se especializa en técnicas aéreas y luego de aprenderlas desarrolla diversas metodologías de enseñanza tanto para adultos como para niños. Diseña elementos aéreos no convencionales para investigar, con ellos realiza sus creaciones desde hace ocho años con su compañía. En el año 2004 abre la Escuela del Club de Trapecistas. Mamushka, Mandalah, Grandes Exitos y Brumadhia (sus anteriores obras) se realizaron todos estos años en la Sala del Club de Trapecistas.
-¿Qué es y qué hacen en el Club de Trapecistas?
-El Club de Trapecistas es un enorme galpón que se construyó para una fábrica textil y nosotros ambientamos y habilitamos como escuela de Circo y Sala de Teatro. En el espacio se dan clases de circo, sobre todo de técnicas aéreas, para niños y adultos. También se usa el espacio para los ensayos de la Compañía Circo Negro. Acabamos de estrenar Treptikon, el quinto espectáculo de la Compañía Circo Negro, la cual dirijo desde su creación. En esta obra trabajo con música clásica, como un desafío personal ya que nunca lo había hecho y también como un homenaje, de algún modo, a nuestra niñez y los dibujitos animados que veíamos en esa época. Está muy inspirada en "Fantasía" de Disney. En la obra hay mucho de danza, mas danza clown que danza clásica, un poco de malabares y por supuesto circo negro (que es lo que nos caracteriza, los cuerpos bailando sobre un fondo azul vibrante) y números aéreos, algunos con aparatos convencionales y otros con aparatos que invento yo, después de tantos años de investigar y probar combinaciones y formas. Obviamente es un espectáculo para toda la familia, aunque estemos los sabados a las 21 hs y los domingos a las 20hs.
-¿Cómo acercar a los chicos al circo plástico o danza aérea?
-Con los niños trabajamos básicamente desde el juego, con canciones, rimas y cuentos. Es desde las imágenes que construimos que los acercamos a los aparatos aéreos. También les enseñamos un poco de acrobacia de piso y malabares, más como iniciación al circo que como especialización. De todas maneras sin darse cuenta van aprendiendo también la técnica correcta para trepar, invertir, balancear o girar en los aparatos aéreos. Trabajamos también con elementos construidos por nosotros usando telas o cuerdas, creando nuevos espacios para investigar.
-¿Cuáles son los principales códigos en el trapecio/circo plástico?
-Nosotros priorizamos ante todo la seguridad. Desde el comienzo les enseñamos que siempre hay que ponerse un colchón abajo del trapecio, que hay que cuidar a los compañeros que están trabajando, que hay que concentrarse mucho al estar en el aire.
-¿Qué buscan los chicos y chicas cuando deciden empezar con la escuela?
-Supongo que divertirse, jugar, explorar. Educar al cuerpo en el movimiento es darle herramientas para la libertad.